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No hay que discutir que algunas personas poseen por naturaleza la facilidad de disfrutar de la comunicación con la gente. Personas que con naturalidad asombrosa hacen nuevas amistades y se conectan con desconocidos como si fueran amigos de toda la vida. Eso es sin duda un factor de la personalidad que favorece en este tema. Me parece que de este rasgo de personalidad al que le asignamos un 10, pasando por la persona introvertida que prefiere retraerse, la que prefiere la soledad, hasta la que de plano se inclina el aislamiento, es obvio que hay diferentes niveles de sociabilidad. Las personas son así y modificar esos patrones no es imposible, aunque tampoco nada sencillo.

Me parece que estamos hablando del temperamento con el cual nacemos y que solo el Espíritu Santo puede modificar con la regeneración, su llenura y su fruto en los creyentes.

El grupo de discípulos que Jesús armó, no fue una excepción en esto. Entre los doce había diferencias notorias en este sentido. Mientras Pedro podía hablar hasta ser inoportuno, de Simón el zelote no sabemos casi nada. -Pienso que era varón de pocas palabras-. Hasta donde sé, ni siquiera escribió un libro.

A pesar de estas limitaciones, el Señor los escogió como eran: esto podemos verlo en Juan 15:16

No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca;

Lo cierto es que si vamos a cumplir el mandato de llevar el evangelio, tenemos que analizar qué nivel de conectividad interpersonal poseemos, para que partiendo de ahí, hagamos lo humanamente posible por elevarlo. No hay modo de compartir el evangelio sin interactuar con otras personas y mientras más sociables seamos, más posibilidades tendremos de ser escuchados y ver al evangelio cumplir su cometido: Salvar.

Viene a mi mente el recuerdo del amado hermano misionero Russell Turner –quien recientemente entró a la presencia del Señor-. Cuando lo conocimos  a finales de 1980, no pudimos comunicarnos directamente ya que él hablaba inglés.  Todas nuestras conversaciones eran a través de nuestro querido hermano misionero Roy Seals, su yerno, que para entonces estaba a punto de convertirse en nuestro pastor. No obstante más allá de las palabras, la sonrisa del hermano Turner, era un puente poderoso que comunicaba a nuestros corazones, la certidumbre de la Verdad de la Palabra que nos compartía. La llenura del Espíritu Santo y su bendito fruto en él, eran un testimonio poderoso sin palabras.

Puede parecer difícil pero en realidad como dijo Jean-Louis Jack Kerouac…

La sociabilidad es sólo una gran sonrisa y ésta no es más que dientes.

–Créame que yo he visto maravillosas sonrisas sin ellos-. ¡Sonría más!

Todo discípulo ha sido elegido por el Señor como es y puesto para llevar fruto que permanezca.

LA SOCIEDAD A LA QUE SOMOS ENVIADOS,

Generalmente no está interesada en Dios ni en su mensaje.

Romanos 3:11 No hay quien entienda, No hay quien busque a Dios.

2 Corintios 4:4 en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios.

La gente admite la conexión con “personas positivas”.  Recibe mensajes de un Dios que ama, bendice, prospera, provee, protege y que puede curar. Pero al mencionar que es Justo, que demanda arrepentimiento de pecados, conversión sincera, y entrega y que ha destinado un momento para su juicio, la gente hace uso de su libertad y derecho y cierra la comunicación, en ocasiones, abruptamente.

Aunque hay excepciones, tenemos que acostumbrarnos a esto. Ha sido así desde los días de Juan de Juan el bautista. Mateo 14:3-5.  3 Herodes había prendido a Juan, y le había encadenado y metido en la cárcel, por causa de Herodías, mujer de Felipe su hermano; 4 porque Juan le decía: No te es lícito tenerla. 5 Y Herodes quería matarle, pero temía al pueblo; porque tenían a Juan por profeta.

Hechos 24:25 Pero al disertar Pablo acerca de la justicia, del dominio propio y del juicio venidero, Félix se espantó, y dijo: Ahora vete; pero cuando tenga oportunidad te llamaré.

A los discípulos, esto nos pone en aprietos: 1) Decimos la verdad con su respectiva gracia para complacer al Señor o manejamos con diplomacia el asunto para no caerles pesado a ellos y conservar la conexión. Es decir: callar, desviar el tema, disculparnos, o retirarnos con alguna excusa. Adoptando alguna de estas actitudes, estaremos en el límite entre agradar a Dios o agradar al hombre. Aquí también la llenura del Espíritu y su fruto nos ayudarán para proceder adecuadamente en el momento, si andamos en buena comunión con Jesús. 2) O evitamos usar las palabras: pecado, juicio, condenación, arrepentimiento para no herir la susceptibilidad y agradar a las personas. En este caso aplicará el dicho popular que reza: quien es amigo de todos no es amigo de nadie. –Ni de Jesús, quien nos ordenó: Id y predicad el evangelio a toda criatura-. Santiago 4:4 dice !Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios. Aunque el evangelio es una buena nueva llena de amor y de gracia, también lleva la verdad intrínseca de que el hombre necesita al Salvador porque está destituido de la gloria de Dios por sus pecados. Palabras duras y penetrantes hasta el alma, que no son nuestras y no disfrutamos precísamente decir, pero que forman parte de la buena nueva y por tanto verdaderas y necesarias.

Un modo de que nuestro mensaje no sea rechazado es: Acérquese a Dios y será feliz, prosperará económicamente y todo le saldrá bien en la vida. Todo se solucionará. Usted tendrá lo que desea porque Dios quiere únicamente hacerle dichoso. ¡Nadie resiste este mensaje! El único problema es que es totalmente falso. No es el evangelio que nos mandó predicar, sino uno acuñado para eso: ganar adeptos y “algo más”. Proverbios 14:12 Hay camino que al hombre le parece derecho; Pero su fin es camino de muerte.

Las actitudes resultantes que muchos cristianos adoptan hoy, son entre otras: Hacer amigos, pero evadiendo el tema de la religión en apego a aquel dicho popular: «De política y religión mejor no hablar, porque es de mala educación».

Otra es: Prefiero tener muchos amigos, que perderlos por tratar de evangelizarlos. Una más: Prefiero disfrutar de mis contactos (hermanos) en el templo y andar solo fuera de él. Y por último: Nadie tiene que saber acerca de mi vida espiritual.

Ser popular por el simple hecho de serlo no es nuestro objetivo aquí. Extender nuestras conexiones amistosas para recibir el beneficio de su apoyo o patrocinio; tampoco. Hacerles llegar en algún momento oportuno las buenas de salvación sí que lo es.

Esto, porque en medio de esa misma sociedad que rechaza, siempre hay excepciones. Vea si no.

11 A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. 12 Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios Juan 1:11-12 ¿Notó la excepción?

Por esas excepciones, debemos pensar…

¿Qué Quiero Ser o Hacer SOCIALMENTE en Diez años?

Tome  su libreta y describa lo que desea. Lo que sueña en este sentido.

Una vez que lo haya definido, escriba…

¿Cómo piensa aumentar su círculo social? ¿Con quienes comenzará? ¿Sobre qué argumento los convocará? ¿Dónde se reunirá? ¿Cada cuándo? ¿Cuántos deberán ser sus nuevos contactos en un mes por ejemplo?

¿Tiene listo un plan para evangelizar?

¿Una Biblia marcada con textos clave? ¿Folletos o literatura para el discipulado?

EJEMPLO DE JESÚS EN HACER AMIGOS

ZAQUEO

Lucas 19:5 Cuando Jesús llegó a aquel lugar, mirando hacia arriba, le vio, y le dijo: Zaqueo, date prisa, desciende, porque hoy es necesario que pose yo en tu casa. (Encontramos a Jesús haciendo una nueva conexión)

MARTA, MARÍA Y LÁZARO.

Lucas 10:38 Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea; y una mujer llamada Marta le recibió en su casa. 39 Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra.  (Esta era la razón de sus conexiones)

Más adelante… Juan 11:3-4; 38, 41-42

3 Enviaron, pues, las hermanas para decir a Jesús: Señor, he aquí el que amas está enfermo. 4 Oyéndolo Jesús, dijo: Esta enfermedad no es para muerte, sino para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella. 5 Y amaba Jesús a Marta, a su hermana y a Lázaro.

Cuando Jesús llegó al lugar donde Vivían, Lázaro llevaba cuatro días sepultado.

38 Jesús, profundamente conmovido otra vez, vino al sepulcro. Era una cueva, y tenía una piedra puesta encima.

41 Entonces quitaron la piedra de donde había sido puesto el muerto. Y Jesús, alzando los ojos a lo alto, dijo: Padre, gracias te doy por haberme oído. 42 Yo sabía que siempre me oyes; pero lo dije por causa de la multitud que está alrededor, para que crean que tú me has enviado. (Aprovechó las conexiones aun en estos momentos para dar testimonio de la verdad a toda la multitud que los rodeaba).

Dios le conceda realizar sus metas. Persista y vencerá.

PD: ¡ADVERTENCIA!

La superioridad de la inteligencia conduce a la insociabilidad. Arthur Schopenhauer

Más vale no sentirnos muy inteligentes.

Bendiciones.

Pastor Verde.

M. F. Verde.

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